Cartagena-Ponferradina, estreno con desatino de la Liga para un Efesé que tuvo opciones hasta el final (2-3)

Esta vez los sufridores in situ en el Cartagonova fuimos 7.483, los mismos que premiamos con palmas y ovaciones en las fases de un partido muy cambiante, con piel de camaleón en su segundo tiempo. Dos cuadros parejos, igualados hasta en los presupuestos económicos.

Los del botillo se han propuesto alcanzar su Centenario con sueños de Primera División y ya han colocado el primer ladrillo.

Tuvieron la victoria en sus manos para no sufrir tanto como sufrieron hasta los 94 minutos que duró el espectáculo, porque así lo marcó el reloj y la conciencia de un árbitro, de Santander, Lopez Toca, que esta vez no me gustó.

DANI OJEDA HIZO LA PUÑETA

Un canario en las filas bercianas, Dani Ojeda, el curso anterior en el  descendido Alcorcón, marcó dos perfectos goles en diez minutos: 1-2 en el 50, y 1-3 en el 60, para consolidar la ventaja que se inició para los del portugués José Gomes en el minuto  con el gol del brasileño Lacerda en el minuto 7 . 

A diez minutos del descanso el tres pulmones Mikel Rico empató en plancha de acero inoxidable a pase de Pablo de Blasis.

Y como revulsivo, quizás demasiado tarde, Borja Valle metió el segundo gol (87') que daba esperanzas ante una remontada imposible. Pero Amir y su defensiva tuvieron que aguantar el soponcio, arrinconados por el empuje albinegro. Entraron en el 58 Tejera (balonazo al cielo,  buscando el gol, pelotazo recibido el balón por San Pedro), y  Franchu  por Musto y Ferreiro, y en el 80 tuvo sus minutos el albanés Saduki con algunos incordios.

    Viñeta realizada por SPORT ÍCUE

Pero no se pudo evitar la derrota albinegra en la jornada en la que Marc Martínez cumplía 100 partidos en el Cartagena. La culpa fue de los desatinos, nada que oponer al portero barcelonés, del equipo de Carrión que, con todo lo que pasó, la paradoja es que tuvo opciones hasta el final para empatar, apabullando a la Ponfe, metiéndola en su área en un montón de saques de esquina. Una catarata de córneres.

Un 2-3, responda otra vez...El encuentro no fue un concurso  de la tele de los años de la polka, porque dio más vueltas que una veleta loca movida por una legión de vendavales de asqueroso aire caliente. Tanto nadar para morir en la orilla, que dijo el arquitecto Calatrava o alguien muy listo como él. 

La Ponferradina, con vestido color amarillo calabaza también de Un, Dos, Tres, confirmó sus hechuras en la segunda parte, con juego de toque, y su pacto indefinido con  el diablo cornudo o las brujas de escobas de caña de Albatera/Catral, me da igual, para continuar venciendo al Efesé. No hay manera. No hay forma de que suceda la contrario.

LA PALABRA DE GUILLERMO JIMÉNEZ, EN YOU TUBE

LOS GAFES VINIERON DEL BIERZO

De algún modo los gafes barrieron al FC Cartagena cuando el primer tiempo fue el propio de un partido igualado, serio, encaminado al empate que habría sido desenlace justo. Bien plantados los dos conjuntos. Con salida fulgurante del Efesé que pudo marcar muy pronto en una acometida de Iván Calero por la derecha que fue respondida por el portero internacional iraní Amir, baqueteado en el fútbol portugués, un guardameta al que la grada del espléndido Cartagonova silbó a coro por su lentitud de tren chicharra cada vez que el persa iba a sacar de portería.

    Viñeta realizada por SPORT ÍCUE

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¿Qué corresponde ahora? Darle el soponcio a la SD Huesca en la próxima jornada en El Alcoraz y recordar a los cerebros fichantes del Efesé que sí, que aún faltan algunos refuerzos. Los debe de buscar Breis con la linterna de Diógenes, el filósofo griego apodado el cínico.

En todos los casos, ánimo que esto empieza ahora.